La Navidad tiene algunas comidas y alimentos clásicos, y uno de ellos es el Turrón que solemos comer exclusivamente en estas fechas. Yo no soy de comer mucho turrón, por eso algún que otro año, una tableta se me ha quedado en la despensa muerta de risa. Una buena opción para que eso no pase, o bien para comer turrón de otra forma distinta es hacer esta tarta.
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Esta es una versión muy sencilla que no necesita horno, muy similar a la tarta de queso que publiqué como primera receta de este blog. Vamos a ver cómo se hace.
INGREDIENTES
- 300 g Turrón blando
- 150 g azúcar
- 500 ml nata líquida
- 200 ml leche
- 1 paquete de galletas tipo maría/ tostada
- 50 g aproximadamente de mantequilla
- 7 hojas de gelatina neutra
- Almendra picada para decorar (Opcional)
ELABORACIÓN PASO A PASO
Lo primero es triturar las galletas y mezclarlas con la mantequilla derretida. Toda la galleta debe impregnarse de mantequilla pero no en exceso. Ponemos esa mezcla en un molde y aplastamos con una cuchara para hacer la base de nuestra tarta. Dejamos enfriar en el frigorífico.
En un cuenco ponemos agua fría y metemos las hojas de gelatina para que se hidraten mientras hacemos el relleno de la tarta. En una olla ponemos a calentar la leche, el azúcar, la nata y la tableta de turrón previamente cortada en trozos. Removemos durante unos 8 minutos para que el azúcar se disuelva y el turrón se ablande. Pasamos la mezcla por la batidora para eliminar todos los grumos.
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Escurrimos la gelatina y la disolvemos en un poco de agua muy caliente. Una vez disuelta la agregamos a nuestra mezcla y movemos bien. Vertemos la mezcla con cuidado sobre la base y dejamos enfriar hasta que cuaje. En mi caso, cuando vi que la superficie comenzaba a cuajar, espolvoreé por encima la almendra picada para decorar.
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