Hola de nuevo! En esta entrada os enseño una receta facilísima para combatir el calor del verano tomándonos un rico helado pero sin los remordimientos de estar comiendo algo con un montón de azúcar y calorías. Para hacerlo no es necesario tener una heladera, aunque si la tenéis os facilitará muchísimo el proceso.
INGREDIENTES
- 400 g Yogurt Griego 0%
- Edulcorante al gusto
- 200 g Frutos rojos o similar congelados
- Opcional: Nata para montar
ELABORACIÓN PASO A PASO
En mi caso elegí la opción sin nata para que fuera lo más ligero posible, pero si lo preferís, podéis usar nata para que quede un helado más cremoso. Voy a explicaros las dos opciones:
Opción sin nata: Sacamos los frutos rojos unos minutos antes del congelador para que no estén tan duros y podamos triturarlos con la batidora junto con el edulcorante y lo llevamos de nuevo al congelador. En otro recipiente ponemos el yougurt con el edulcorante y lo llevamos al congelador.
Opción con nata: Lo primero que debemos hacer es montar la nata. Para ello la batimos en un recipiente que esté perfectamente seco. Una vez montada la apartamos.
Sacamos los frutos rojos unos minutos antes del congelador para que no estén tan duros y podamos triturarlos con la batidora junto con el edulcorante. Una vez triturados, le añadimos un poco de nata con movimientos envolventes y lo llevamos de nuevo al congelador. Mezclamos con movimientos envolventes el yogurt con edulcorante y el resto de la nata y lo llevamos al congelador.
Una vez en el congelador, nos armaremos de paciencia y cada 20 minutos tendremos que sacar los recipientes y removerlos para que no se formen cristales y consigamos un helado cremoso. Sacar del congelador unos minutos antes de consumir y a disfrutarlos.
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